Las barbas del vecino

Recibo el pasado martes este mensaje:


"Estimado usuario:

Lamentamos comunicarte que nuestra sociedad matriz ha resuelto suspender las actividades no rentables.

Entre las actividades que vamos a suspender figura el área de correo electrónico. Por esta razón, te notificamos la cancelación de tu cuenta de correo electrónico el 15.02.2009. Actualmente estamos trabajando para encontrar la forma de proporcionarle el servicio mediante otro proveedor. A lo largo de las próximas 4 semanas le informaremos en caso de éxito. Pero si esta posibilidad no se produjera, el servicio se dará por finalizado.

Hasta ese día podrás seguir accediendo como de costumbre a tu cuenta de correo y continuar recibiendo y enviando mensajes. A partir de esta fecha, cancelaremos tu cuenta y borraremos todos los contenidos y derechos de acceso que haya guardado en Lycos relacionados con tu cuenta de e-mail, tomando en consideración las disposiciones legales vigentes.

Desde ese momento, ya no te será posible recibir o enviar mensajes con tu dirección de correo electrónico, ni tampoco podrás acceder al contenido de tu buzón. Por este motivo, te rogamos que asegures en los próximos días todos los datos importantes de tu cuenta de correo Lycos y cambies a otro proveedor de correo electrónico.

En caso de que hayas abonado opciones adicionales sujetas a pago, te reembolsaremos naturalmente el importe restante en la cuenta bancaria que hayas indicado.

Sentimos tener que adoptar esta medida y te agradecemos la confianza depositada en nosotros.

Atentamente,
El equipo de LYCOS Mail"

Por si alguien no se había dado cuenta, Internet forma parte del mundo real, y también aquí las empresas funcionan si tienen beneficios económicos. Tras un año de pérdidas, parece que Lycos, uno de los antiguos gigantes en Europa, ha optado por soltar lastre para intentar remontar el vuelo (o, quién sabe, simplemente mantenerse a flote)

No se me hace extraño que cierre un servicio gratuito. La historia de internet es como la de las especies: extinciones, evolución y supervivencia.

Otros antes han pasado por apreturas (léase Yahoo!), y se han recuperado, bien que en momentos de mayor bonanza. Pero no se había llegado al punto de suspender servicios, salvo por desaparición total de la empresa.

En el caso de Lycos, lo que me llama la atención es que suspenden también servicios de pago, y eso indica que la situación es más grave de lo que expresan en la nota.

Habrá que seguir el caso, a ver qué pasa el 15 de febrero.